Un equipo del ODG hemos seguido sobre terreno la #FfD4, la Cuarta Conferencia Internacional de las Naciones Unidas sobre financiación al desarrollo. Recogemos algunas ideas clave del Compromiso de Sevilla y os compartimos los vídeos de la cobertura desde Sevilla.
15.000 personas de 150 países, representantes estatales, más de 1.000 entidades de la sociedad civil y 6.000 delegadas del sector privado han participado en la Cuarta Conferencia de Naciones Unidos sobre Financiación para el Desarrollo (Ffd4 en sus siglas de inglés). De todas estas participantes, solamente las delegaciones oficiales de la ONU tenían voz y voto para aprobar el Documento final que tenía que salir de este encuentro, el llamado Compromiso de Sevilla. Los temas claves de esta conferencia incluían la deuda soberana, la fiscalidad internacional, la financiación de la cooperación al desarrollo y la reforma de las instituciones financieras internacionales. Así lo resumía Mar Sala, en una colaboración con la periodista audiovisual, para explicar qué ha pasado estos días en Sevilla.
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Sin embargo, el documento ya estaba cerrado antes de que empezase esta cita multilateral. Pero podría haber sido un resultado distinto, ya que tras los focos, el Sur Global decantaba la balanza hacia una reforma sustancial del sistema económico-financiero y de su gobernanza. Lo ha impedido el bloqueo de los países del Norte Global, en especial la UE y el Reino Unido. Así lo resume Nicola Scherer, investigadora del ODG en justicia financiera, en un artículo para Público:
“Las grandes protagonistas —invisibilizadas— han sido las alianzas entre Estados del Sur Global, en concreto el Grupo Africano (54 Estados), el Grupo de los Países más empobrecidos (LDC, 44 Estados) y la Alianza de Pequeños Estados Insulares (AOSIS, 39 Estados). Durante las negociaciones han apoyado demandas transformadoras: crear un convenio marco de Naciones Unidas vinculante sobre Deuda Soberana y otro para la cooperación internacional al desarrollo; democratizar el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, dando voz y veto a los países del Sur Global; la necesidad de controlar los poderosos fondos de inversiones privados (como Blackrock, JP Morgan, etc.) y regular las agencias de rating (Moody’s, Standard & Poor’s y Fitch Rating). Por desgracia, estas demandas han sido finalmente rebajadas en el Compromiso de Sevilla, o directamente excluidas, en la última ronda de negociación que se llevó a cabo quince días antes de la Conferencia a puerta cerrada”.
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La sociedad civil hemos denunciado la falta de ambición del Compromiso de Sevilla con una manifestación histórica, ya que a excepción de las COP, ha sido la primera vez que se autoriza una movilización política dentro del recinto que acoge una cimera de la ONU. Esta acción también denunciaba la disparidad de trato que ha recibido el poder corporativo y financiero, ya que mientras la sociedad civil tenía su Foro Social dos días antes del programa oficial y en un hotel alejado del FIBES, la ONU permitió al sector privado organizar su Business Forum los mismos días de la Conferencia y en el mismo recinto de Naciones Unidas. Para Scherer, esto refleja a plena luz del día la complicidad entre multinacionales y agencias financieras, y el espacio político de decisión global.
Como explica Stéfano Prato, portavoz del Mecanismo de la sociedad civil en esta FfD4, “no hay democracia real si la sociedad civil, con todas sus voces, experiencias e historias, no puede participar de manera profunda y significativa en el proceso” del Compromiso de Sevilla. “Nos vemos expulsados exclusivamente a un rol de audiencia, en el que solamente podemos escuchar lo que los Estados miembros están discutiendo. Mientras, tienden la alfombra roja a la participación del sector privado”, señala en el segundo vídeo colaborativo con Sala.
Como contrapropuesta a medidas más ambiciosas, los países acreedores del Norte Global ofrecen falsas soluciones como los canjes de deuda por naturaleza, es decir, la cancelación puntual de una parte de la deuda externa de los países empobrecidos a cambio de acción climática (la protección de un bosque, una reserva marina…). Estos canjes de deuda han resultado ineficientes para resolver la crisis de deuda, y han sido criticados por ser poco trasparentes, perpetuando dinámicas de poder de los países acreedores sobre los países endeudados. Por otra parte, también denunciamos la falta de concreción en la implementación del Compromiso de Sevilla, ya que no hay sobre la mesa una hoja de ruta clara, con fechas y herramientas de fiscalización que marquen los próximos pasos a seguir para los Estados participantes en la FfD4. Os resumimos las conclusiones en este vídeo con Mar Sala:
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El Foro Feminista y el Foro Social
Una de las cuestiones clave en esta conferencia de la ONU ha sido el vínculo entre deuda y emergencia climática. Se ha visto especialmente en el marco del Foro Feminista y del Foro Social, organizados fuera del programa oficial de la FfD4, con la participación de centenares de entidades de todas partes del mundo.
“La deuda y la emergencia climática están muy relacionadas. Forman parte de un círculo vicioso”, expone Carola Mejía, de Latindadd. “Los países altamente endeudados están destinando más de su presupuesto a pagar sus deudas, que a educación, sanidad, y a la agenda climática. Tienen menos dinero público para responder ante emergencias”, como los fenómenos climáticos extremos, que van en aumento. “Cuando pasa un evento así, tienen que recurrir a más deuda”, denuncia Mejía.
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Bonus track: ¿Cómo es el backstage de una conferencia de la ONU?
Como último contenido, os compartimos un Vlog sobre estos días de FfD4, captando el ambiente dentro del recinto y preguntando qué impactos tienen eventos de estas dimensiones para la población local.
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