Moisés Borges, activista del Movimiento de Afectados por Represas (MAB Brasil), realiza una gira en estos días por Europa para denunciar el crimen de la empresa brasileña de minería Vale en Brumadinho.
Visitará las Naciones Unidas, el Parlamento Europeo y mantendrá diversas reuniones con organizaciones europeas para solicitar apoyo y solidaridad. Estará con nosotros estos días en Barcelona.
La rotura de una represa en Brumadinho ha causado la muerte de 160 personas y 150 continúan desaparecidas, además del tremendo desastre medioambiental provocado.
La represa de Brumadinho en Brasil, crónica de una tragedia anunciada.
Sobre el Movimiento de Afectados por las Represas (MAB):
Movimiento de Afectados por las Represas (MAB, por las siglas en portugués de su nombre Movimento dos Atingidos por Barragens) – es un movimiento popular, autónomo, de lucha, de masas, de base e que pretende organizar toda la población amenazada o afectada por represas, en su mayoría represas hidroeléctricas. Es un movimiento que lucha para garantizar los derechos de estas poblaciones, principalmente a la tierra, forzando y contribuyendo en la construcción de un nuevo modelo energético, alternativo y popular para Brasil.
Hace 20 años la historia del MAB viene siendo construida con la participación integral de las poblaciones afectadas en la vida del movimiento. Somos afectados por las represas, campesinos, pequeños agricultores, sin tierra, indios, pescadores, «ribeirinhos» (comunidades que viven a orillas de los ríos) y «quilombolas» (comunidades negras), buscadores de minerales y también poblaciones urbanas. En Brasil, somos más de un millón de personas expulsadas de nuestras tierras, de nuestras casas, de nuestras comunidades, por la forma dictatorial de construcción de represas.
Cada 100 familias afectadas, 70 tienen su derecho negado por las empresas constructoras. En los próximos tres años, 100 mil familias más están amenazadas de perder sus tierras en función del interés de las empresas transnacionales. Pretendiendo aumentar y mejorar la participación de la población afectada en la vida del movimiento, así como mejorar la división de tareas y responsabilidades, definimos que la forma de organización de base es a través de pequeños grupos de cinco a diez familias, con coordinadores en cada grupo, con coordinaciones locales, regionales y nacionales. Actualmente el MAB es una organización nacional, presente en 15 estados del país y tenemos en el trabajo de base um desafío constante para aumentar nuestra organización y la consciencia de la lucha. Entendemos que la lucha organizada y el protagonismo de las masas es el motor de la transformación de la realidad de nuestro país. Por eso la formación y la información de las poblaciones afectadas o amenazadas por represas es la principal herramienta para la lucha consciente en la construcción de un Proyecto Pupolar para el Brasil. Articular alianzas y apoyos con movimientos, entidades sociales, sindicales y ambientales, universidades y organizaciones que se identifican con nuestra lucha, hace parte de nuestra estrategia.
El 14 de marzo es el Dia Internacional de Lucha de los Afectados por Represas. La construcción de un nuevo modelo energético alternativo y popular, que tenga entre sus pilares como prioridades: el control popular del agua y la energía, la economía de la energía, el fin de la mercantilización, precio justo, energia para el desarrollo interno, el fin de los subsidios a las grandes empresas, una matriz con base a energías alternativas como la biomasa, la eólica, la solar y el repotenciamiento. El fin de la construcción de represas. La garantía de los derechos de las poblaciones afectadas y la preservación del ambiente. En contra del modelo capitalista neoliberal y por la construcción de un Proyeto Popular para el Brasil. Entendemos la lucha de los afectados por represas como parte de la lucha mayor de los excluídos de la clase trabajadora en la construcción de una nueva sociedad y de un proyecto popular para Brasil. El modelo de sociedad capitalista neoliberal ha aumentado la exclusión social y la concentración de las riquezas, incluyendo el agua y la energía, en mano de unos pocos. Necesitamos construir con el pueblo, el proyecto del pueblo, basado en nuevos valores y principios.