Se trata de la primera investigación sobre coherencia de políticas para el desarrollo del modelo energético español. La grave dependencia y vulnerabilidad energética en las que vive instalada la economía española conduce a tener que garantizar a toda costa los suministros de petróleo, gas, carbón, uranio y agrocombustibles en países terceros, principalmente en África, Oriente Medio, Rusia, América Latina e Indonesia. Ello convierte la seguridad energética en una de las tres principales políticas de la acción exterior española, a la vez que conduce a una geopolítica dura sobre los territorios suministradores. Pero ¿existe algún tipo de control público en el marco del Estado de ese tipo de anticooperación energética?
Un encargo de la Plataforma 2015 y más, publicado aquí, y realizado en el marco de una investigación más amplia, coordinada por Natalia Millán del Instituto Complutenses de Estudios Internacionales y la Plataforma 2015 y más.