Más de un año de huelga contra Elon Musk y Tesla: «No quieren que la gente que trabaja tenga derecho a opinar». Alfons Pérez, investigador del ODG, entrevista a Arturo Vasquez, defensor de IF Metall, el sindicato que está haciendo frente en Suecia a la compañía del magnate, por no querer negociar un convenio colectivo.
El pasado 27 de octubre se cumplió un año del inicio de la huelga de los trabajadores afiliados al sindicato IF Metall de la sucursal sueca de Tesla, TM Sweden, por la negativa de la empresa a negociar un convenio colectivo. Aunque enfrentarse al todopoderoso Elon Musk pueda parecer una lucha de David contra Goliat, IF Metall y sus 300.000 personas afiliadas son una roca dura de roer. Sus propias acciones, como sostener un año de huelga, la solidaridad obrera intersectorial, escandinava e internacional, y las fuertes movilizaciones, hacen de este conflicto un cortafuegos de resistencia ante los abusos corporativos de las grandes empresas en la llamada transición verde. Conversamos sobre este conflicto y sobre la transición con Arturo Vasquez, defensor sindical de IF Metall, encargado de defender los derechos de las personas afiliadas, resolver conflictos y actuar como mediador.
¿Cómo se inició el conflicto con Tesla que aún perdura?
TM Sweden se estableció en Upplands Väsby, al norte de Estocolmo, con el fin de dinamizar la venta de coches y ofrecer servicios de mantenimiento y reparación, unas tareas muy especializadas dada la complejidad técnica de los vehículos Tesla. Intentamos negociar un convenio colectivo con la empresa, pero no hubo manera.
¿Por qué es tan importante para IF Metall la firma de un convenio colectivo?
Hay que conocer el contexto sueco para ver que es de suma importancia para las personas trabajadoras. En Suecia no existe un sueldo mínimo interprofesional y otros muchos detalles de las relaciones laborales se establecen en los convenios colectivos. Incluso hay una institución pública, Medlings-Institutet, que media entre la patronal y los sindicatos para llevar las negociaciones a buen puerto.